por Patricio Arenas, desde París.
• Reeligió Presidente a Evo Morales por cinco años (2010-2015).
• Barrió a la Derecha del Parlamento.
• El mandato del pueblo a Evo y demás dirigentes es el de consolidar un Estado plurinacional al servicio del cambio histórico-estructural en beneficio de las grandes mayorías del país.
1) En las elecciones del domingo 6 de diciembre de 2009, el MAS de Evo Morales alcanzó los dos tercios de la votación nacional, tanto en la elección presidencial (para el periodo 2010-2015) como en la Asamblea legislativa plurinacional (85 diputados MAS sobre 130 y 25 senadores MAS sobre 36). Esta relación de fuerzas institucional le permitirá al MAS nombrar, sin oposición, a las autoridades judiciales y dictar las leyes de aplicación de la nueva Constitución política ratificada en enero de este a ño por el 62% de los electores y promulgada en febrero. Además debe señalarse que el triunfo del MAS en 7 de los 9 departamentos del país, recuperando Tarija (donde se encuentran los gigantescos yacimientos de gas), Chuquisaca y Pando, sumado al crecimiento del respaldo en votos logrado en Santa Cruz de la Sierra y Beni, anticipa probablemente un nuevo avance del gobierno en las elecciones prefecturales (gobernadores de departamentos) y municipales del 4 de abril próximo, las que completarán el ciclo electoral del periodo de transición hacia el nuevo Estado plurinacional de Bolivia.
2) Bajo la primera presidencia de Evo Morales (2006-2010), y a pesar de las turbulencias generadas por la crisis económica mundial, a partir de septiembre del año pasado, Bolivia duplicó el PIB que pasó de US 9.000 millones en 2005 a US 19.000 millones hoy. Así, el ingreso per cápita se situa ahora en mil 671 dólares frente a mil 10 dólares en inicios de 2006. La estimación oficial de crecimiento del PIB es de 4.5 por ciento en 2009, probablemente el más alto de América latina, nivel que se proyecta mantener en 2010. A través de un alza a los impuestos aplicados a las multinacionales, la renta petrolera pasó de representar un 4,5 % del PIB en 2003 a un 14,7% del PIB en 2006. Con una parte de estos nuevos recursos, el gobierno está aplicando planes sociales dirigidos a dar bonos directos a los niños, adultos mayores y madres y otras prestaciones que abarcan a una cuarta parte de la población de 10 millones de habitantes. Entre estos beneficios están el bono “Juancito Pinto”, que beneficia a 1.800.000 niños de primaria, “Renta Dignidad”, para todos los ciudadanos mayores de 60 años sin ingresos y, en fin, el bono “Juana Azurduy” para las mujeres embarazadas o lactantes.
3) La Derecha del Cono Sur busca articular una contraofensiva política y social pero, hasta ahora, no logra ponerla de pie. La Derecha está sometida a la presión de las oligarquías y el empresariado interno, golpeados por la crisis mundial, que exigen medidas legislativas, y de otra índole, para descargar los efectos de la crisis sobre los asalariados. Por otra parte, la necesidad de que las fuerzas reaccionarias retomen la iniciativa es alentada por el sostén de Obama al golpe de Estado en Honduras así como por el intervencionismo militar directo de los EEUU en Colombia y Panamá. Si bien el imperialismo y las fuerzas reaccionarias han obtenido un triunfo importante al legitimar las elecciones fraudulentas en Honduras, en el Cono Sur los acontecimientos de las últimas semanas indican que la Derecha no logra capitalizar el descontento social que genera la crisis mundial, como lo demuestran los siguientes hechos: contención del golpe de Estado destituyente contra Lugo en Paraguay, aunque la amenaza sigue latente; reconducción del Frente Amplio en la Presidencia de Uruguay; y, en fin, triunfo amplio y categórico del pueblo boliviano por profundizar el cambio hacia la izquierda. El resultado de la elección presidencial en Chile marcará un desplazamiento hacia la Derecha, facilitado por la gestión neoliberal de Bachelet, y más acentuado en el caso de que Piñera supere a Frei.
Chile enfrenta fuertes tensiones limítrofes con Perú. A su vez, la consolidación política de Evo Morales torna insostenible el status quo de no solución del conflicto marítimo pendiente entre ambos países, que es un requisito ineludible para el desarrollo del país del altiplano. La reivindicación boliviana de salida soberana al Pacífico es respaldada públicamente por Fidel Castro, Chávez y la corriente bolivariana continental. Tampoco hay que minimizar el eco creciente que el ejemplo boliviano de fundación de su estado plurinacional encuentra entre los mapuches y demás pueblos originarios del país austral, que han recomenzado a reclamar su derecho a la autodeterminación nacional. Fenómeno que es extensible al conjunto de los pueblos andinos.
• Reeligió Presidente a Evo Morales por cinco años (2010-2015).
• Barrió a la Derecha del Parlamento.
• El mandato del pueblo a Evo y demás dirigentes es el de consolidar un Estado plurinacional al servicio del cambio histórico-estructural en beneficio de las grandes mayorías del país.
1) En las elecciones del domingo 6 de diciembre de 2009, el MAS de Evo Morales alcanzó los dos tercios de la votación nacional, tanto en la elección presidencial (para el periodo 2010-2015) como en la Asamblea legislativa plurinacional (85 diputados MAS sobre 130 y 25 senadores MAS sobre 36). Esta relación de fuerzas institucional le permitirá al MAS nombrar, sin oposición, a las autoridades judiciales y dictar las leyes de aplicación de la nueva Constitución política ratificada en enero de este a ño por el 62% de los electores y promulgada en febrero. Además debe señalarse que el triunfo del MAS en 7 de los 9 departamentos del país, recuperando Tarija (donde se encuentran los gigantescos yacimientos de gas), Chuquisaca y Pando, sumado al crecimiento del respaldo en votos logrado en Santa Cruz de la Sierra y Beni, anticipa probablemente un nuevo avance del gobierno en las elecciones prefecturales (gobernadores de departamentos) y municipales del 4 de abril próximo, las que completarán el ciclo electoral del periodo de transición hacia el nuevo Estado plurinacional de Bolivia.
2) Bajo la primera presidencia de Evo Morales (2006-2010), y a pesar de las turbulencias generadas por la crisis económica mundial, a partir de septiembre del año pasado, Bolivia duplicó el PIB que pasó de US 9.000 millones en 2005 a US 19.000 millones hoy. Así, el ingreso per cápita se situa ahora en mil 671 dólares frente a mil 10 dólares en inicios de 2006. La estimación oficial de crecimiento del PIB es de 4.5 por ciento en 2009, probablemente el más alto de América latina, nivel que se proyecta mantener en 2010. A través de un alza a los impuestos aplicados a las multinacionales, la renta petrolera pasó de representar un 4,5 % del PIB en 2003 a un 14,7% del PIB en 2006. Con una parte de estos nuevos recursos, el gobierno está aplicando planes sociales dirigidos a dar bonos directos a los niños, adultos mayores y madres y otras prestaciones que abarcan a una cuarta parte de la población de 10 millones de habitantes. Entre estos beneficios están el bono “Juancito Pinto”, que beneficia a 1.800.000 niños de primaria, “Renta Dignidad”, para todos los ciudadanos mayores de 60 años sin ingresos y, en fin, el bono “Juana Azurduy” para las mujeres embarazadas o lactantes.
3) La Derecha del Cono Sur busca articular una contraofensiva política y social pero, hasta ahora, no logra ponerla de pie. La Derecha está sometida a la presión de las oligarquías y el empresariado interno, golpeados por la crisis mundial, que exigen medidas legislativas, y de otra índole, para descargar los efectos de la crisis sobre los asalariados. Por otra parte, la necesidad de que las fuerzas reaccionarias retomen la iniciativa es alentada por el sostén de Obama al golpe de Estado en Honduras así como por el intervencionismo militar directo de los EEUU en Colombia y Panamá. Si bien el imperialismo y las fuerzas reaccionarias han obtenido un triunfo importante al legitimar las elecciones fraudulentas en Honduras, en el Cono Sur los acontecimientos de las últimas semanas indican que la Derecha no logra capitalizar el descontento social que genera la crisis mundial, como lo demuestran los siguientes hechos: contención del golpe de Estado destituyente contra Lugo en Paraguay, aunque la amenaza sigue latente; reconducción del Frente Amplio en la Presidencia de Uruguay; y, en fin, triunfo amplio y categórico del pueblo boliviano por profundizar el cambio hacia la izquierda. El resultado de la elección presidencial en Chile marcará un desplazamiento hacia la Derecha, facilitado por la gestión neoliberal de Bachelet, y más acentuado en el caso de que Piñera supere a Frei.
Chile enfrenta fuertes tensiones limítrofes con Perú. A su vez, la consolidación política de Evo Morales torna insostenible el status quo de no solución del conflicto marítimo pendiente entre ambos países, que es un requisito ineludible para el desarrollo del país del altiplano. La reivindicación boliviana de salida soberana al Pacífico es respaldada públicamente por Fidel Castro, Chávez y la corriente bolivariana continental. Tampoco hay que minimizar el eco creciente que el ejemplo boliviano de fundación de su estado plurinacional encuentra entre los mapuches y demás pueblos originarios del país austral, que han recomenzado a reclamar su derecho a la autodeterminación nacional. Fenómeno que es extensible al conjunto de los pueblos andinos.
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