El muro...desde enero de 2009

Bienvenidos a El muro, un espacio creado por escritores comunistas chilenos.
Porque no basta estar informados o dejar que otros sean los interpretes "desinteresados" de nuestras ideas... nosotros somos historia, y hacemos la historia, sin falsos pudores de hijos putativos del consenso o la cohesión social ( eufemismo perverso para la gran siesta de los últimos 20 años en Chile).
Aquí encontrarás también un espacio para tu opinión. Nos interesa saber qué pasa con tus sueños, porque estamos seguros que hay que despertar para seguir soñando.
El Muro está recién pintado.
Vamos entonces, sin prisa, pero sin pausa...

miércoles, 15 de abril de 2009

Del grabado rupestre al graffiti



A lo largo del desarrollo social, a través del tiempo y del espacio, a lo largo de años infinitos y siglos milenarios, el graffiti ha estado en el alma del artista. En el deseo y la tentativa de expresar en líneas, en dibujos y en palabras su ser interior y el mundo circundante en lugares públicos.







DEL GRABADO RUPESTRE AL GRAFFITI

María Cristina Pi Arias y Norton Contreras Robledo


La historia del arte está ligada íntimamente a la historia del desarrollo de la sociedad en general y a la del ser humano como sujeto civilizado e inteligente en particular. Con el desarrollo del pensamiento se desarrolló también la capacidad del cerebro humano de reconstruir mentalmente la idea de los objetos y los fenómenos de su medio circundante, después de su observación directa.

A esta cualidad mental se deben las primeras tentativas de reproducir dichas ideas en imágenes gráficas efectivas. El hombre pudo representar gráficamente los objetos sólo después de que en el proceso del trabajo alcanzaran un alto grado de perfección sus órganos, especialmente la mano, y se desarrollaran los instrumentos.
En las paredes de las cuevas y en los declives de las rocas empezó a dibujar hombres y animales con los que describía hechos vitales para su supervivencia. Nos han dejado escenas de caza y en general, todo cuanto llenaba su vida y que hasta entonces, había retenido por largo tiempo en su memoria. Los trazos al principio eran muy simples y lineales, pero con el tiempo añadió color obtenido de mezclas minerales. Estas obras y su manera de ejecución estuvieron condicionadas por la misma sociedad humana y su manera de vivir y reflejaban el grado de comprensión del hombre por la naturaleza que le rodeaba.

EXPRESIONES DIFERENTES

El primer gran hito del hombre vinculado con la necesidad de expresar su pensamiento lo encontramos ahí, en los grabados realizados en las paredes de las cuevas. Los hombres de esas comunidades primitivas levantaron su mano y con un objeto punzante empezaron a dibujar y a grabar sobre la piedra sin sospechar que miles de años más tarde sus pinturas, serían consideradas las primeras representaciones artísticas, lo que se conoce como Arte Rupestre. Él había sentido la necesidad de dejar constancia de sus ideas y emociones, y por eso nos dicen – Yo estuve aquí. Ésto vi. Así lo sentí
Las representaciones encontradas son arte y a la vez un medio de comunicación, pero la idea del hombre nació como arte de expresar gráficamente lo que veía. Considerar las pinturas y los dibujos del arte Rupestre, sólo como una forma de comunicación corre el riesgo de confundir la naturaleza del lenguaje. Porque las palabras y las pinturas, pertenecen a esferas, manifestaciones y expresiones diferentes.
La necesidad de expresar todo lo que sucede a nuestro alrededor ha sido una constante desde los albores de la humanidad. La motivación básica de mostrar y relatar en espacios públicos su mundo circundante y su vida cotidiana sigue y esta ahí, siempre presente. Sólo han cambiado las técnicas, los conocimientos y los aprendizajes.

EXPRESIÓN DE REBELDÍA

El arte, desde sus orígenes, no es sino la reproducción por medio de imágenes, del ambiente real en que vive el hombre. En el período de florecimiento de la sociedad primitiva, el hombre podía plasmar con exactitud el aspecto exterior de distintos objetos, de los fenómenos de la naturaleza, etc. Pero el conocimiento humano era limitado y no era capaz de explicar su esencia, sus concatenaciones e interdependencias.
Hoy miramos esas pinturas y vemos que nos están contando una historia, la historia de las comunidades prehistóricas. Nos dicen dónde vivían, cómo vivían, de qué vivían, nos hablan de cómo era el mundo que les tocó vivir. Marcaban la separación de lo público y lo privado. Lo público estaba representado por los elementos históricos, la comunidad gentilicia (las gens) el territorio, el colectivismo y el trabajo social, la propiedad social de los medios de producción. Lo privado, representado por el individuo, el mundo circundante y la vida cotidiana. Es en este contexto histórico del desarrollo de la sociedad en que surge el arte rupestre y es este contexto el que determinó su papel y función de comunicación y de expresión artística.
La vida siguió su curso y la sociedad y el hombre avanzando y desarrollándose, surgen la propiedad privada sobre los medios de producción, las clases sociales, el Estado como órgano de las clases dominantes, cuyo papel y función es defenderla, usando la opresión de clases. Es en este contexto histórico en que desde su simiente el arte rupestre resurge y se reencarna en el graffiti como una respuesta, como una necesidad de la historia. Recordemos que el arte desde su nacimiento, es la reproducción por medio de imágenes artísticas del ambiente real en que vive el hombre. El graffiti tiene sus orígenes en el esclavismo, y seguramente como una expresión en contra del orden establecido.

RESONANCIA DEL GRAFFITI

Los arqueólogos, los historiadores han encontrado las pintas más antiguas en las ruinas de las antiguas ciudades de Roma, Pompeya y también en monumentos del antiguo Egipto.
Se llama graffiti a varias formas de inscripción o pintura, generalmente sobre propiedades públicas o ajenas (como paredes, vehículos, puertas y mobiliario urbano especialmente pistas de skate). En el lenguaje común, graffiti incluye lo que también se llama pintadas: es decir pintar en las paredes letreros, preferentemente de contenido político o social sin el permiso del dueño.
Según dicen algunos escritores: “el graffiti es guerrilla urbana, lucha en contra de lo establecido, es la libertad de expresión en estado puro. Expresarse más allá de las leyes, más allá de las normas, de lo que se puede y no se puede hacer”. El graffiti toca todas las superficies, mucho, poco tiempo, muchos colores, pocos. No sólo es el hecho del vandalismo sino de expresarse donde no está permitido, mostrando tu obra a todo el mundo. El graffiti es una crítica y una agresión allí donde se haga, sin límites, sin censura.

GRAN CAMPO DE EXTENSIÓN

Los antecedentes modernos más relevantes del graffiti los encontramos en París, de mayo de 1968: “La imaginación al poder”, “Debajo del asfalto está la playa”, etc. En Chile, durante el gobierno de Salvador Allende (1970-1973). En los 70 el principal escaparate de graffiti era el metro neoyorquino. Cada vez había más competición por ver quién pintaba más y más grande hasta que a alguien se le ocurrió plasmar su firma originando el verdadero auge del graffiti. Se empezó a usar aerosoles. Las piezas eran cada vez más grandes con distintos trazos y efectos (trazo, sombras, etc.). El movimiento se extendió por todo Estados Unidos.
Las autoridades se cansaron y empezaron a poner vigilancia. El graffiti salió del metro y sus vagones para extenderse a cualquier superficie. El graffiti viajó por el mundo gracias a un video que mostraba la escena neoyorquina: Style Wars.
Los orígenes del graffiti moderno están determinados en cuanto a la separación de lo público (historia, poder) y lo privado (individuo, vida cotidiana). Son transgresores, cuestionadores, están en contra del sistema y orden establecido y irradian una aptitud de poder y a partir de éste de cambios en favor de las mayorías desposeídas, marginadas y con ilusiones, de igualdad, democracia, solidaridad y justicia social.

EL GRAFFITI, LA CARA DE LA CIUDAD

Muchas personas confunden al graffiti con lo que ha cen los vándalos, quienes se encargan de ensuciar las paredes con aerosoles, pintando lugares públicos y los históricos, sin ningún tipo de miramiento o respeto. Esta no es una situación nueva, en la ciudad de Pompeya se han encontrado escritos, en donde los ciudadanos piden no ensuciar las fachadas de sus casas.
En la ciudad de Barcelona, se emprendió una campaña “Barcelona posa't guapa”, que proporciona ayudas económicas para la restauración y limpieza de las fachadas de los edificios. Es una tarea infructuosa, casi antes de que se termine de adecentar la finca, las paredes vuelven a mostrar las pintadas de los vándalos.
El fondo del problema está en poder dar respuesta a la pregunta de ¿por qué lo hacen? Tendría fácil solución si se tratara de falta de espacios. En este caso podrían habilitarse lugares al aire libre donde pudieran expresarse con total libertad en cuanto a motivos y pinturas. Sus creaciones, sus murales formarían parte del paisaje urbano y serían temporales, para que pudiera ser ocupado por otros.
Pero además de estos grupos, podríamos decir creativos, no podemos olvidarnos de todos aquellos que forman un colectivo mucho más invasivo. Me refiero a todos aquellos que armados con un atomizador, escudándose en la oscuridad, alertas para no ser descubiertos asaltan cualquier puerta, persiana, pared, farola, banco, suelo, nada está exento de ser estampando con símbolos, letras, garabatos. No pretenden ser artistas, quieren expresar su identidad, un deseo de decir – Eh, tú aquí estoy yo--. Es una manera de llamar la atención, una forma de comunicarse, de darse a conocer. Y son transgresores – ¿no se pueden hacer pintadas?– --¡Pues ahora te vas a enterar!–. ¡Toma! . Ahí por donde pasan, en cada calle, en cada rincón su firma (graffiti). Se dan a conocer pero anónimamente. Un símbolo no dice nada acerca de la persona que lo ha hecho.

CARÁCTER ESPECULATIVO

Ellos usan alias que los representan, muy pocos los conocen, pero el resto de la gente puede referirse a ellos. En este sentido, el fenómeno conocido en la psicología de masas, como rumor, hace que el hecho se propague como el viento por las calles de la ciudad –Mira, éste ha sido capaz de pintar en el monumento de... Para estos puede llegar a convertirse en una competición. A ver quién es el más osado, en cuantos espacios seré visible. En estos casos, se podría creer que el graffiti es individual y que pasa a ser grupal por imitación, “si este pinta, yo, también pinto”.
Los verdaderos graffiteros no hacen eso, sino que utilizan ese arte para expresar un sentimiento, un ideal, un mensaje reflexivo o un reclamo político o social, en fin, nos dan su visión particular del Mundo. El graffiti es un medio de expresión de los marginados, de los clandestinos y perseguidos por ir en contra del orden establecido.
Este arte está hecho para ser visto por muchos, pero es entendido por pocos. La diferencia de estos dos grupos, vándalos y graffiteros, es que los vándalos pintan para marcar su territorio, mientras que los verdaderos graffiteros pintan para manifestar su arte. Cuando no se entiende la diferencia de estos dos grupos surge la mala reputación de este arte callejero.
Conclusión: A lo largo del desarrollo social, a través del tiempo y del espacio, a lo largo de años infinitos y siglos milenarios, el graffiti, ha estado en el alma del artista, en el deseo y la tentativa de expresar en líneas, en dibujos y en palabras su ser interior y el mundo circundante en lugares públicos. Es en este sentido en que podríamos decir, que el graffiti ha estado en todas las civilizaciones, y que se ha manifestado y expresado según la etapa histórica del desarrollo de la sociedad.

María Cristina Pi Arias – Psicóloga- Educadora Social
Norton Contreras Robledo_ Comunicador Social

1 comentario:

  1. Buenísimo artículos queridos... felicidades.

    La rebeldía nos encuentra en el arte.
    cariños

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